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Desempeño médico-social del Dr. Antonio Moreno Luna en Holguín (1939-1953)

Liliana Romero Pérez[1]

Susel Abad[2]

 

RESUMEN

En este artículo se realiza un análisis del accionar médico y social del Dr. Antonio Moreno Luna, quién fuera una de las figuras más importantes de Holguín de los años 40 y 50 por su destacada participación política desde el Partido Socialista Popular. En este sentido, se realiza en un primer momento un acercamiento a la medicina en el contexto de la República burguesa, a nivel nacional y local; para posteriormente desvelar su trayectoria y accionar social y profesional en la medicina, convirtiéndose en una personalidad respetada y querida por la sociedad holguinera.

Este merecido lugar entre su pueblo fue el resultado de años de comprometido trabajo con los pobres y los más necesitados, así como su incursión científica en campos como la gastroenterología, las enfermedades infecciosas y la tuberculosis, padecimientos comunes de la época que afectan severamente a la salud.

Palabras claves: salud, medicina, política, socialista, República burguesa.

 

Medical-social performance of Dr. Antonio Moreno Luna in Holguín (1939-1953)

ABSTRACT

This article analyzes the medical and social actions of Dr. Antonio Moreno Luna, who was one of the most important figures in Holguín in the 1940s and 1950s due to his outstanding political participation from the Popular Socialist Party. In this sense, an approach to medicine in the context of the bourgeois Republic, at a national and local level, is carried out at first; to later reveal his career and social and professional actions in medicine, becoming a respected and loved personality by Holguin society. This well-deserved place among his people was the result of years of committed work with the poor and the most needy, as well as his scientific foray into fields such as gastroenterology, infectious diseases and tuberculosis, common ailments of the time that severely affected health.

Keywords: health, medicine, (politics,) socialist, (communist,) bourgeois republic.

 

INTRODUCCIÓN

La historiografía nacional ha abordado  las cuestiones relacionadas con la salud  en la República y se ha ocupado de las Ciencias Médicas en diversas facetas  a lo largo de la historia nacional, sin embargo, no ha incursionado, exceptuando algunas investigaciones, en las dinámicas particulares y territoriales. En este sentido el rol desempeñado por figuras importantes de la medicina cubana ha quedado relegado a segundos planos. Es por ello que la realización de estudios enfocados en personalidades fuera sumamente importante para el saber de nuestros estudiantes para que puedan entender y valorar  que muchos enaltecieron su profesión como médicos en función de la sociedad e hicieron historia a través de sus luchas en diferentes posturas ante el mal manejo de la salud en Cuba y trabajaron en función del pueblo más necesitado.

Médicos como Antonio Moreno Luna que sin ser holguinero, sacrificó y defendió por una mejor disponibilidad de la salud para los más necesitados, los humildes de la sociedad y lo hizo desde su postura de comunista que lo acompañó durante toda su vida,  a partir de este postulado puede considerarse la influencia ejercida por este médico, sobre el cual la realización de un trabajo más profundo, arrojaría una mayor compresión desde su labor médico-social y político- revolucionario en el contexto de las Ciencias Médicas.

Para esta investigación se consultaron las fuentes documentales primarias depositados en el Fondo Raro y Valioso de la Biblioteca Provincial Alex Urquiola, en los cuales se encontró información importante de la salud y la figura de Moreno Luna.

En el Archivo Histórico Provincial de Holguín se consultaron los fondos del Doctor Antonio Moreno Luna y Fondo división política administrativa, indispensables para la realización de esta investigación. En los fondos de la Biblioteca del Museo Histórico Provincial se accedió al otro fondo existente sobre el doctor Antonio Moreno Luna donde predomina el testimonio gráfico y otros documentos sobre su vida. Se cuanta a su vez con el testimonio de personas que lo conocieron e calidad de pacientes con los cuales se ha enriquecido la tesis.

A partir de lo expuesto nos planteamos el siguiente Problema Científico:

¿Qué rol desempeñó el Dr. Antonio Moreno Luna desde la salud en Término Municipal Holguín durante la República?

Objetivo: Revelar los aportes y el desempeño médico- social del Dr. Antonio Moreno Luna  desde la salud en Holguín durante la República.

 

MÉTODOS

Se emplearán métodos teóricos y empíricos de la dialéctica materialista, así como la utilización de métodos cualitativos, cuantitativos y fuentes. 

Métodos teóricos y empíricos

       Análisis y crítica de fuentes, análisis y síntesis, inducción/ deducción y  relación de histórico /lógico, que permitirán a partir de la epistemología existente y los nuevos datos empíricos extraer deducciones para construir el nuevo conocimiento.

       Entrevistas para la reconstrucción a través de testimonios que estuvieron alrededor de la vida del Doc. Antonio Moreno Luna  

       Hermenéutico: Análisis de textos, del contenido y del discurso lo que trae como resultado determinar la fiabilidad del texto, intereses clasistas e institucionales  subyacentes en él e interpretar el texto en dos perspectiva- como interpretación literal y como interpretación del mundo del texto, discernir la realidad histórica de la interpretación subjetiva del autor del texto.

Resultado de nuestra investigación es Reconstruir los aportes y el impacto médico-social del Dr. Antonio Moreno Luna en Holguín.

 

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

En Cuba durante la República Burguesa, existió una pobre gestión por parte de los gobiernos de turno para cambiar la complicada realidad que presentaba la salud, fundamentalmente para los sectores más humildes de la población. La ciudad de Holguín no fue la excepción ya que presentaba una situación socialmente difícil: malas condiciones higiénicas en las calles, hambre, el desempleo y analfabetismo, esta fue una de las ciudades que fueron abandonadas a su suerte por  las administraciones de la época. Solo las personas acaudaladas podían permitirse el lujo de gozar de otra realidad, las buenas atenciones y recursos sin límite en cuanto a la medicina y bienestar social. 

Holguín, presentaba enfermedades en abundancia, tenía el record de epidemia en toda la República de Cuba, demostrando en el números de enfermos que había, el cáncer, difteria, lepra, paludismo, poliomielitis, sarampión, tifoidea, tuberculosis conocida como la enfermedad del pobre y varicela, dejaron amargas experiencias en nuestra población.

Como se ha observado la situación holguinera era muy difícil fundamentalmente para aquellas personas humildes y carentes de recursos económicos. Este panorama también influyó en la salud como se ha expuesto, que se encontraba para estos años fundamentalmente la salud estatal  totalmente deficiente y no respondía a las necesidades de la población. No todas las personas tenían la facilidad de disfrutar los servicios de salud como los sectores más pobres y hasta los sectores de la clase media. Para 1959 existía solo 22 médicos y 22 enfermeras, 2 estomatólogos, 9 clínicas particulares con capacidad de 242 camas y 11 hospitales, 8 de estos al servicio solamente de empresas y 3 para la población. Un total de 296 camas, siendo insuficiente hasta para aquellas personas que podían costear su asistencia médica.[3]

La ciudad contaba solo con un viejo Hospital Civil que se encontraba ubicado en la Quinta del Llano, con 120 camas para enfermos. Los periódicos de la época nos muestran la real situación del municipio en cuanto a la sanidad y la proliferación de las enfermedades.

A la salud pública el gobierno dedicó un por ciento muy bajo del presupuesto estatal, demostrado por la carencia y poco recursos de las instituciones dedicadas a la salud, las que se encontraban en estado deplorable. El presupuesto dedicado a suplir las necesidades y mantener cada instalación hospitalaria era solo de 98 059 pesos aproximadamente, no alcanzando a 20 centavos por ciudadanos , provocando la prolongación y agravamiento a través del tiempo de la situación imperante de la salud en Holguín ya que no era destinado el capital suficiente para cubrir ni siquiera las primeras necesidades de urgencias ante cualquier  situación en esta rama[4].

Pero si existían clínicas privadas que reportaban buenos dividendos a sus dueños como la “Áviles”, “Frexes”, “Toll”, la Electro-dental” y la “Clínica obrera”. La clínica “Frexes” era propiedad de los Dres. Frexes y Francisco Zorrilla los que trabajaban junto a una enfermera y un enfermero, conformando todo el personal calificado que allí laboraba. Los cuartos se dividían por categoría de 2, 3 y hasta 5 pesos, según las posibilidades económicas y estatutos sociales de las personas ingresadas, así era el cuarto que podían ocupar[5].

Zorrilla como tantos médicos, se destacan en esta época donde juegan un papel importante en su labor médico-social donde servía como aliente a tanta necesidad que tenía la salud en la población y en los sectores más humildes. Cuando llega a Holguín, la medicina estaba muy atrasada, además, existían muy pocos médicos en la ciudad, de ahí que este se convirtiera muy pronto en una figura de prestigio y a la que no dudaban en acudir en caso de necesidad la mayoría de la población.[6]

En este contexto histórico llega Antonio Moreno Luna en 1939, graduado en Medicina en 1938 en la Habana  y luego especialista en primer grado en medicina interna. Se encontraba casado con su primera esposa,  Zoila Rodríguez Guzmán  y con 2 de sus 6 hijos. Era un hombre de recursos modestísimos, empleado de un laboratorio en la Habana, por lo tanto carecía de la posibilidad abrir un consultorio en función de pueblo, siendo su mayor sueño.

El Partido Socialista Popular le propone a Moreno Luna, un proyecto de ayudarle a montar un consultorio para que ejerciese su profesión de médico y comenzar  atender a sus militantes, a campesinos, obreros agrícolas, en fin a personas de pocos recursos económicos. Muchos se identificaron con este acto social tan noble, lo que permitió que  se aportara un  granito de arena para trabajar en la creación de este consultorio, en pintura, trabajo de carpintería, arreglo y adaptación.  Con grandes esfuerzos y recursos se pudo montar un modesto Policlínico del Pueblo que  también lo posibilitó con el  aporte económico de familias como por ejemplo: un hermano de su esposa, llamado Ramón Rodríguez, poco a poco logró desarrollar su equipamiento y laboratorio clínico ya para 1940. Este nobel centro se ubicaba en la calle Máximo Gómez entre Luz y Caballero. Así se cumplió el caro anhelo de Moreno Luna para ejercer la profesión que había estudiado y ponerla al servicio de la gente humilde y  trabajadora[7]

Moreno Luna  tenía gran respeto a sus pacientes, sea del nivel o sector económico que fuere. En sus consultas escribía sistemáticamente sus recetas y métodos en máquina de escribir a pesar de contar con una letra rápida y difícil de leer. No le gustaba emplear con los pacientes un lenguaje técnico médico, prefería hacerse entender ya que consideraba pedante al médico que abusaba así de sus pacientes, sin embargo, tenía un dominio fenomenal de la terminología médica (facilitado por su gran capacidad para memorizar). Consideraba que el médico que se daba a entender, no solo hacía más por sus pacientes, sino tenía más porciento de curarlos, lograba que el enfermo le depositara una mayor confianza a la hora de examinarlos.[8]

Nunca puso reparos a las constantes salidas de madrugadas ante el reclamo de sus pacientes enfermos; muchos casos eran urgentes, de muy lejos y algunos, de lugares lejanos y rurales. Sus pacientes eran mayoritariamente humildes, gente de campo y del pueblo. Era detallado, atento y muy cariñoso, con los niños en particular. Muchísimos llegaban al consultorio sin  dinero para comprar medicina y  le indignaba el elevado precio de los medicamentos y la frecuente falta de calidad de los mismos.

Según las referencias del testimonio escrito, de su hijo Antonio Moreno Rodríguez que vivió y creció con los valores que caracterizaban a  Antonio Moreno Luna en el ejercicio de la medicina donde planteaba:

 (…) Debía de atender a centenares de personas diariamente, hubo períodos en que el consultorio estaba abarrotado, sin contar las personas que requerían visitarlos a sus hogares y las casas que debían salir a visitar en el campo y aún en monte adentro. Después de la atención directa a los pacientes debía asumir la responsabilidad del desarrollo de las pruebas diagnósticos complementarios de laboratorio, atender al día las historias clínicas….

(..) Prueba de esto de su arraigo en el pueblo de toda la actual provincia de Holguín, porque su influencia como médico bueno y médico de los humildes, salió de las fronteras de la ciudad y se extendió por toda la provincia Oriental. Su prestigio fue mucho entre los humildes, con la devoción con la que la gente se refería a él, la conocí, la escuché muchas veces, oír hablar bien de mi padre fue algo que desde niño me acostumbré…. [9]

Entre las personas que conocieron al Dr. Moreno Luna se encuentra Mirian Salazar Borjas, quién fue paciente del mismo, al igual que toda su familia en aquella época, al respecto nos comenta:  

Bueno más o menos estos médicos ponían tratamiento (…) entonces a Zaida la empezó a tratar y en ese tiempo Zaida quedó embarazada de su segunda hija y él la trató, creo que cuando Pupi nació, Pupi tenía problema, Pupi el diagnóstico que tenía era hipotiroidismo congénito con rasgos de mongolismo y él desde que Pupi nació Zaida se lo trajo para que él lo viera y eso tenía Pupi como 20 días, él se percató enseguida que era una niña que tenía problema porque el mongolismo es una cosa que los rasgos se detecta rápidamente y el empezó a tratar  y a tal extremo que fue el caso que más él le puso una atención y ver la constancia que tenía mi hermana a los tratamiento que él le ponía y Pupi se desarrolló prácticamente haciendo una vida una vida normal de mandarla a la escuela de todo el caso de Pupi fue un mérito grande para el médico Moreno Luna

Mirian nos refiere que en lo que respecta a su condición de militante del Partido Comunista de Cuba y la atención médica que prodigaba a sus pacientes:

cuándo iba a convenciones porque el salió a varios países no siendo los Estados Unidos que él no pudo entrar porque él pertenecía al Partido Socialista Popular y a los Estados Unidos nunca pudo entrar , pero fue a varios países creo que a Francia y a otros lugares, había convenciones médicas y llevó el caso de Pupi  porque yo creo que de los pocos casos que un niño con retraso mental llegara hasta un nivel de cuarto grado y se hiciera mecanógrafo, pero fue  una constancia muy grande tanto de él como tenía mi hermana y mi cuñado toda la familia con ella de seguirle tratamiento al pie y lograr él le hacía recomendaciones a mi hermana que fuera a la Habana que habían sicólogos que la valorara su edad mental. El visitaba mucho a sus paciente que tenía, no tanto por el interés del dinero porque incluso aparte de tener su consulta particular él tuvo muchos casos que ni les cobraba porque al lado precisamente de Zaida mi hermana al lado vivía un señor creo que ese matrimonio no tuvo hijo ese señor se enfermó de los pulmones.[10]

Una de las luchas que Moreno Luna sostuvo en Holguín fueron en contra de los laboratorios chiveros (son los laboratorios clandestinos), cuyo personal  expedían medicamentos que no estaban científicamente comprobados y con falta de calidad, lo que conllevó a una gran disputa contra estos fraudes, incluso dentro de los médicos y a crear conciencia contra éstos en la población. Fue una lucha  en la que él fue un verdadero abanderado. 

Siguiendo esta línea, la falta de dinero para la medicina se mantuvo en una proporción importante de sus pacientes, lo que conllevó que siempre tuviera provisiones de medicamentos que le dejaban a solicitud de él, los visitadores médicos (misma profesión que él ejercía). Estos medicamentos lo regalaban a los enfermos más necesitados, logrando así resolver los tratamientos y llevar adelante las curaciones, en particular en los niños. Continuando con el testimonio de su hijo sobre el tema de los pacientes expresa de su padre El hacía (…) lo indecible por llevar adelante y resolver exitosamente la curación de sus pacientes, en particular ayudaba mucho a los más pobres y sobre todo a los niños (…)[11]

Siempre tuvo como principal objetivo mejorar la salud y la calidad de vida de los holguineros aunque como se ha dejado plasmado con anterioridad, era habanero, pero esto no le impidió que  se identificara por sus luchas sociales donde trató de darle siempre solución. Por su intensa  labor  profesional ,  su  calificación  como  galeno , le  ganó  un  prestigioso  lugar  entre sus  colegas médicos, lo que posibilitó que fuera fundador y presidente (1942  al  43) y posteriormente secretario (1943  al  44 y en otras etapas) del “Colegio Médico” de Holguín, organización que tenía como objetivo darle mayor unidad a los médicos y una  mejor preparación, con la fiel función de ayudar siempre a los desvalidos.

 De las campañas más importantes del Colegio Médico y a las que aportó decisivamente Moreno, la referida a la defensa del seguro médico a nivel nacional y la rebaja de los medicamentos destaca por la vanguardia desplegada por los médicos holguineros.

A decir de Moreno:

Nuestro colegio fue unos de los primeros en convocar y organizar el comité de defensa de la seguridad social y los seguros integrado por todos los sectores y organizaciones afectados por la tangibilidad del seguro médico. Nuestro colegio fue el primero en toda la República que se organizó el comité pro-rebaja del precio de los medicamentos y la labor desempeñada por el Colegio Médico de Holguín fue uno de los factores decisivos en que se obtuviera el reajuste de los precios, con lo que se logró el pueblo cubano directo de nuestra lucha y tuvo la confirmación una vez más de que los médicos (..) estamos siempre a su lado (…)[12]

Moreno tendría una implicación directa en el Boletín del Colegio Médico de Holguín, también fundado y dirigido por él, editándose el mismo durante 15 años, imprimiéndole una de orientación progresista. Este Boletín, constituyó una fuente de divulgación científica- preventiva, para el personal médico y para la población por la variedad de los temas que trataban y dentro de sus páginas se realizaban críticas a las malas condiciones de higiene de la ciudad de Holguín, también se  informaba sobre los principales descubrimientos dentro de la ciencia médica tanto a nivel nacional como internacional ya que se recibían trabajos de médicos investigadores extranjeros para promover el desarrollo que la medicina poco a poco fue alcanzando en todas sus aristas. 

El doctor Antonio Moreno Luna, también ilustró a sus lectores de sus publicaciones tanto de crítica de  salud como también estudios de casos o situaciones como lo fue un artículo que publicó sobre estudios realizados a los paciente  inyectados con penicilina a los que les aparece en el sitio de la inyección flebitis y tromboflebitis, dando la orientación de qué hacer en estos casos para evitar dicha complicación: “ Este accidente puede eliminarse por el cambio diario de la vena para inyectar, así como el uso de las soluciones diluidas”[13] Otro de sus artículos fue: Holguín: Ciudad o Aldea“, en el que se plantean las condiciones de insalubridad de la ciudad y la despreocupación de las autoridades, dándole al Ministro de Salubridad y Beneficencia de aquel momento el nombre Ministro de la Basura. Logra declarar a Holguín ciudad muerta, cuando se encontraba luchando para obtener para la ciudad los beneficios de un acueducto y un alcantarillado, reuniendo al pueblo en una manifestación conocida como “Día de la dignidad” (12 de diciembre de 1948)[14]

Entre los demás temas abordados por Moreno se encuentra el referido a la lucha desplegada por la defensa de la ciencia dentro del campo de la medicina contra las supersticiones y los curanderos, quienes a decir del propio médico se dedicaban a cobrar por sus supuestas divinidades y esquilmaban a la población inculta y de menores recursos, que acudían a estos falsos practicantes para remediar sus males de salud, como, las hernias, apendicitis, cegueras, paraplejias, y otros padecimientos comunes. A este aspecto dedicó uno de sus trabajos en el boletín.[15]

Como militante del partido se postula Luna, a  Concejal   del  Ayuntamiento, para mejorar desde la administración las condiciones existente en la ciudad en  el  periodo  de  1942  al  44, en su campaña propone y lucha por la creación de un hospital para los niños del territorio en una conferencia que pronuncia el 30 de septiembre de1946 en la radio ( CMKO propiedad de Manuel Angulo Farran)

Estimados radioescuchas:

Nuestra palabra en esta charla de hoy va dirigida a todos los ciudadanos de Holguín y a las autoridades de la nación  que deben estar alertas para recibir la demanda de una necesidad y resolverla en el menor plazo de tiempo (..) Cuanto de los que escuchan nuestras palabras no habrán sentido en su carne el dolor de ver a su hijo atenazado por una enfermedad y saberse carente de recursos de dinero y facilidades con las que poder retribuirles su salud perdida. Y cuántos de ellos no habrán conocido la terrible de ver a su hijo morirse sin asistencia médica, o con asistencia porque ningún médico se niega a asistir a un  niño enfermo aunque no le paguen, pero sin recursos económicos para darle medicina necesaria (..) más también habrán padres y madres que tienen a sus hijos sanos pero que sufren el temor de que harán cuando se les enfermen sin en ese momento no tienen dinero para atenderlo y los habrán también que teniendo de enfermedades (…) En nuestro término existe un alto porcentaje de mortalidad infantil. Un día vimos la cifra de los  enterramientos en el cementerio de Holguín y nos horrorizo comprobar que se había enterrado igual números de adultos que de niños (…) Holguín septiembre de  1946[16]    

Moreno Luna a lo largo de su carrera como médico, se identificó por el gran amor y cariño que sentía hacia los niños y  cada vez que tuvo la oportunidad manifestó su dolor e indignación por la despreocupación y desinterés de las autoridades que podían cambiar la realidad de aquellas criaturas inocentes particularmente pobres que muchas veces se morían antes de llegar a su mayoría de edad.

Por la situación sanitaria y malas condiciones de vida la dirección  del Partido junto a Moreno Luna  orientó  organizar en 1945  el movimiento  cívico, Los Mil Amigos y una comisión Pro-acueducto, alcantarillado y pavimentación de Holguín,  propiciando que se desarrollaran grandes luchas, hasta declarar a Holguín Ciudad Muerta y obtener por ello las demandas solicitadas.

En la oficina del PSP, que en aquel entonces radicaba en la  calle  Miró  número 77,  va a aparecer en una valla la  consigna  de  lucha  Acueducto, Alcantarillado, Pavimentación y  Audiencia  para  Holguín, Vergüenza contra   Dinero, quedaba con ella el pueblo impactado y a la vez conmovido. Al comité de lucha se unirían los sectores populares, la Iglesia Católica y el credo religioso para llevar adelante la batalla por estas demandas. Esta unión de tantos sectores favoreció que la repercusión alcanzara niveles nacionales e internacionales.

La  prensa  también contribuyó a  divulgar  las  razones  de  esta sonada lucha, haciéndose su portavoz. Se van crear dos periódicos, El Acueducto y El Socialista, con el objetivo de hacer conciencia dentro de la sociedad holguinera de la importancia de la lucha que se estaba acometiendo de obtener para Holguín, como se ha dejado referenciado anteriormente el acueducto, alcantarillado etc. cuyo el papel principal lo tuvo el Doctor Antonio Moreno Luna, siendo su principal director.

En estos periódicos de  corte comunista, divulgaban no solo esta lucha como quedó plasmado anteriormente, sino todas las acciones que se realizaron en la etapa para el mejoramiento de la calidad de vida de los pobladores holguineros.  

El pueblo holguinero comprendió en medio de este disturbio, las ventajas de contar con estos útiles servicios, en particular por el aumento de las fuentes de empleo para el obrero desempleado. No solo la población veía los beneficios sino también los sectores burgueses, oportunistas al fin, con sus rejuegos sucios, deseaban sacar  jugosas  ganancias para s u bolsillo.

El  1 de enero de  1945,  fue  publicado en  el  Semanario,  un  escrito titulado: No  hay  Salud sin Agua, donde se  explica las principales causas  por  las que  al   pueblo le urgía le presencia de un  Acueducto, nuevamente Luna hace un llamado a la conciencia al reflejar las consecuencias que se derivan de la inexistencia de este  servicio, donde planteaba:

“El Acueducto  es  el  moderno  concepto  de salubridad,  la  solución  a  los  problemas  epidemiológicos  e  higiénicos  de  cualquiera  ciudad, la  población  está  llamada  a  desempeñar  un  digno  papel  en  la vida  nacional  y  es  una  de la  más  importante  en  Oriente.” [17]

Siendo Concejal dentro del Gobierno y junto  a   su  compañero   Oscar  Ortiz,  desarrollaron una campaña en función de esta lucha social  por  todo  el  término  holguinero, donde descubrieron que el alcalde Eduardo  Ochoa  Ochoa se encontraba confabulado  con  el  norteamericano  arrendatario  de  las  Minas  de  Oro  de  Aguas  Claras,  Míster Grino, para crear  una  empresa  con  el  presupuesto que estaba  destinado  al  Proyecto  del  Acueducto   y para  la  construcción  del  Instituto  de  Segunda  Enseñanza y  para  otros  fines. El  Partido Socialista Popular, denunció  y  desenmascaró de forma contundente, estas sucias y mal intencionadas maniobras, poniendo al tanto al pueblo, merecedor de conocer la verdad de lo sucedido, trayendo como consecuencia la reacción popular inmediata ante el hecho.[18] 

En la década del 50, en la Habana se encontraba en periodo de elecciones y se produce un acontecimiento que va a cambiar la realidad cubana, el golpe  de  estado  del 10 de marzo de  1952 encabezada por el militar Fulgencio Batista al verse sin la menor posibilidad de ganar las elecciones , suceso que provocó gran conmoción a nivel nacional. Sectores ante este suceso asumen diferentes posiciones, los más reaccionarios lo apoyan por conveniencia pero otros trataron de combatirla por las consecuencias que traería para Cuba.

En Holguín, unos de  los sectores que se rebelaron fue los médicos, quienes doctores como Moreno Luna  se  reunieron  en  el  Colegio  Médico, donde emitieron  una  declaración jurada, manifestando su rechazó al  golpe  militar y además se iniciaron acciones en modo de protesta  ante  tan  compleja  situación,  generando que  la  policía les montaran una constante persecución y vigilancia[19]

En ese mismo año, la dirección  del PSP con Oscar Ortiz, al frente, se acuerda que el doctor Moreno Luna sea el director del semanario el Socialista, educador de las masas de obrero y campesino, con el objetivo de luchar contra la corrupción administrativa imperante en el país, contra los desalojos de los campesinos, la rebaja de salarios, el asalto de los sindicatos por Banda Mujalistas.

El 24 de julio de 1953 el PSP se le asignó la tarea de llevar en un ómnibus a más de 40 militantes a la asamblea que se realizaría en Santiago de Cuba, ante los ojos de la policía iban bajo el pretexto de homenajear a Blas Roca por su aniversario, pero a pesar de esto fue impedida por el Ejército, pero este suceso no impidió que posteriormente se reunieran clandestinamente, pero con menos personas en la casa de los nietos del General Antonio Maceo, allí fueron invitados varios compañeros el Doctor Gaspar García Gallo, Nemesio Hernández, José Ruiz, Alcalde de Yaguajay por el PSP y el doctor Antonio Moreno Luna.

Al día siguiente regresa Antonio Moreno Luna  a Holguín, conjuntamente con otros compañeros García Gallo y Joseíto Ruiz y Nemesio Hernández, donde fueron  apresados donde se le acusaba de un supuesto ataque al cuartel de Holguín, trasladándolos posteriormente al Vivac de Santiago de Cuba, lo que nunca imaginaban que iban a estar  y a conocer a los asaltantes del Cuartel Moncada. Se encontraban el Comandante Raúl Castro, Comandante Pedro Miret, Comandante Ramiro Valdés, Comandante Juan Almeida Bosque, Ciro Redondo, José Suarez, Orlando Benítez Nápoles, Mestre que componían el grupo. Tuvo la oportunidad de asistir a la compañera Haydee Santamaría por los golpes que había recibidos[20]

Al salir de la prisión Antonio Moreno Luna fue constantemente hostigado por la policía hasta el punto que tuvo que trasladarse para la Habana, pero él nunca dejó de brindar ayuda a la causa revolucionaria y más cuando empezó la lucha guerrillera en Cuba, donde él conjuntamente a otros médicos enviaba materiales médicos para la cura de heridos. 

 

CONCLUSIONES

Holguín presentaba una situación socialmente difícil: malas condiciones higiénicas en las calles, hambre, el desempleo y analfabetismo, esta fue una de las ciudades que fueron abandonadas a su suerte por  las administraciones de la época, porque respondía específicamente  a los intereses de los capitalistas extranjeros y nacionales, se dedicaban a sacar recursos del Estado para su enriquecimiento ilegal y no realizaban disposiciones para las construcciones de obras públicas

La salud, no fue la excepción, fundamentalmente la estatal era totalmente deficiente y no respondía a las necesidades de la población. El gobierno dedicó un por ciento muy bajo del presupuesto estatal, demostrado por la carencia y poco recursos de las instituciones dedicadas a la salud, las que se encontraban en estado deplorable.

El médico comunista Antonio Moreno Luna, siempre tuvo como principal objetivo mejorar la salud y la calidad de vida de los holguineros. Se identificó y tuvo una activa participación en las luchas sociales donde trató de darle siempre solución. Por su intensa  labor  profesional, su  calificación  como  galeno , se  ganó  un  prestigioso  lugar  entre sus  colegas médicos, porque defendía el objetivo darle mayor unidad a los médicos y una  mejor preparación, con la fiel función de ayudar siempre a los desvalidos y a los más necesitados de nuestra sociedad. 

 

REFERENCIAS

Peña Obregón, Á y Santana López, M. (2007). Historia y arquitectura del reparto La Quinta de el Llano en el Holguín republicano neocolonial. Ediciones Holguín. Holguín. Pág. 24 y 25

San Miguel Aguilar, M  y Pérez Concepción, H. (2010). Urbanización y modernidad Monografía. Ediciones Holguín, Pág. 103

Hechavarría Calcerrada, Z, Abreu Cuenca, K y Velázquez Hechavarría. N. (2004). El pensamiento médico-social del Dr. Antonio Moreno Luna. Holguín.Pág.4 y 5

Zayas, R. (2007) Holguín 1935 a 1952. (Tesis de Maestría) Universidad de Holguín pág. 60

Morales  Pérez, Y,  Rojas  Rojas, N y  Aguilera  Parra, A. Vida   y  obra  del doctor  Antonio  Moreno  Luna.(inédito). Pág. 4

Periódico  Acueducto. Semanario  de  lucha  por  las  demandas  de  Holguín .Enero  1  de  1945. Periquera.

Archivo Histórico Provincial de Holguín. Fondo Antonio Moreno Luna. Caja 1 Expediente 1, 4, 9,13, 22.

Archivo Museo Provincial de Holguín La Periquera (AMPHP). Fondo Antonio Moreno Luna

Entrevista a Mirian Salazar Borjas, paciente del médico Moreno Luna, 3 de marzo de 2020 en la ciudad de Holguín.

 

 

 

 

 



[1]Máster en Historia y Cultura. Universidad  de Holguín. lilianaromero0201gmail.com

[2]Licenciada en Historia. Profesora de Historia. Universidad de Holguín (UHo). suselabad@uho.edu.cu

 

[3] San Miguel, M y  Pérez, H. (2010) Urbanización y modernidad Monografía. Holguín

[4] Peña, Á y  Santana, M. (2007) Historia y arquitectura del reparto La Quinta de el Llano en el Holguín republicano neocolonial. Holguín

[5] San Miguel, M y  Pérez, H. (2010) Urbanización y modernidad Monografía. Holguín

[6] Zayas, R. (2007) Holguín 1935 a 1952. (Tesis de Maestría. Universidad de Holguín)

[7] Archivo Histórico Provincial de Holguín. Fondo: Antonio Moreno Luna. Expediente: 22 Caja 1. Pág. 8 y 9.

[8] Ibídem. Expediente 13 caja 1. Pág. 9.

[9] Ibídem. Pág. 11

[10] Entrevista a Mirian Salazar Borjas, paciente del médico Moreno Luna, 3 de marzo de 2020 en la ciudad de Holguín.

[11] AHPH. Fondo Antonio Moreno Luna. Expediente: 22 Caja 1. Pág.6 y 7

[12] Archivo Histórico Provincial de Holguín. Fondo: Antonio Moreno Luna.Signatura: Expediente 4-caja 1. Pág.20, 21, 22.

[13] Hechavarría, Z,  Abreu K y  Velázquez N. (2004). El pensamiento médico-social del Dr. Antonio Moreno Luna. Holguín.

[14] Ídem.

[15] Archivo Histórico Provincial de Holguín. Fondo: Antonio Moreno Luna. Signatura: Expediente 1 Caja 1. Pág. 36 y 37

[16] Ibídem. Signatura: Expediente 9. Caja 1. Pág. 3,4 y 5.

[17] Periódico  Acueducto. Semanario  de  lucha  por  las  demandas  de  Holguín .Enero  1  de  1945. Periquera.

[18] Morales, Y,  Rojas  Rojas, N y  Aguilera. Vida   y  obra  del doctor  Antonio  Moreno  Luna.(inédito).

[19] Ídem.

[20] Archivo Histórico Provincial de Holguín. Signatura: expediente 15 Caja 1. Reportaje: 12 – 1982. Pág. 4